La maternidad durante mucho tiempo ha sido un ideal, se busca ser la madre perfecta -lo que sea que ello signifique- y como dice una mujer que admiro: “No soy una mamá perfecta pero soy real” y la realidad de la maternidad en México es dolorosa.
Según la ONU, que citó datos oficiales del Gobierno mexicano, el pasado enero México llevaba registradas 61 mil 637 personas desaparecidas, la mayoría entre 2006 y 2019, además de 37 mil personas fallecidas pendientes de identificar sin tomar en cuenta las desapariciones no registradas.
Ahora existen muchos colectivos de madres que salen todos los días a buscar a sus hijxs, a aquellxs que también fueron hermanxs, tixs y sobrinxs. Han encontrado miles de fosas clandestinas, buscan con dolor a aquellxs que todxs hemos perdido a causa de la delincuencia.
El tiempo no cura el dolor de las miles de madres que ahora no pueden abrazar a sus hijxs, hasta no encontrarles no habrá descanso “¿Qué cosa es el cuerpo cuando alguien lo desprovee de nombre, de historia, de apellido? ¿Qué cosa es el cuerpo cuando está perdido?”(Uribe,S. 2012) Esa es la pregunta de miles de Antígonas que habitan este país de desaparecidos esperando recuperar el cuerpo de su Polínices.
Hoy le pedimos perdón a aquellas madres que no tienen a sus hijxs con ellas, y les damos las gracias por tanto...
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